En los últimos años se ha generado una bonita discusión entre los amantes de realizar deporte en bicicleta: si el ciclismo es mejor que el spinning, o viceversa.
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¿Es mejor el ciclismo outdoor o el spinning (ciclismo indoor)?
Entre los dos existen importantes diferencias, más allá que ambas opciones pueden ayudarnos a mantener nuestro cuerpo ideal, porque el ciclismo es muy usado para reducir esas tallas de más que tenemos.
Hay personas que prefieren el ciclismo tradicional, salir a recorrer los caminos, ya sea en la ciudad o la montaña, mientras que otros se inclinan más por realizar el deporte bajo techo, con lo que se evitan algún inconveniente que pueden encontrarse en la calle y se ejercitan a un gran ritmo en un gimnasio.
Al final, entre gustos y colores, como dice el dicho, se puede elegir entre el ciclismo o el spinning, pero es importante tener claro, que no son ejercicios idénticos, ni desarrollamos los mismos músculos, por lo que debes conocer las diferencias, si andas buscando ponerte en forma, gracias a pedalear.
Por eso, es momento de conocer todos los beneficios que nos trae, para la salud y la figura, porque si vamos a elegir entre una de las dos actividades, pues que sea la que nos ayude a conseguir las condiciones que anhelamos.
Como todos sabemos, el ciclismo es un deporte de gran antigüedad que se practica en carreteras o montañas, en la que desarrollamos resistencia al cubrir varios kilómetros pedaleando, mientras sometemos a nuestro cuerpo a las inclemencias del tiempo.
Ganando fanáticos
Por su parte, el spinning nació a finales de los años ochenta, creado por Johnny Goldberg, quien tras ver que era muy complicado entrenar con mal tiempo, desarrolló la bicicleta estática, que fue ganando aficionados alrededor del mundo.
El spinning es un ejercicio aeróbico, en el que se pueden desarrollar varias intensidades de movimiento en cualquier momento de la sesión, guiadas en una clase bajo techo, por un profesor.
La velocidad puede ir desde un ritmo sencillo como un paseo tranquilo hasta al propio estilo de un ciclista profesional, sin dejar de pedalear en ningún momento.
Siempre estamos acompañados durante la sesión con música en el gimnasio, algo que para muchos lo vuelve más llamativo y motivante que el pedaleo tradicional, porque no es necesario estar solo, en sesiones interminables, que pueden terminar en lluvia.
Ojo.
Eso, al colocarnos en el lugar de los que prefieren el spinning.
Ahora vamos a conocer algunas de las principales diferencias entre el spinning y el ciclismo outdoor.
¿Cuál nos ayuda a bajar de peso?
Al momento de hablar de reducir esos kilos de más, así como tonificar nuestra figura, podremos utilizar cualquiera de las dos opciones, porque los principales beneficios los tienen ambas disciplinas, por lo que la quema de calorías es parecida.
En una hora de pedaleo, tanto en el gimnasio, como al aire libre, se puede perder entre 400 y 700 calorías. Además, una hora de bicicleta en un ritmo tranquilo, es decir, si andamos recorriendo algún parque, equivale a 473 calorías, aunque si la velocidad y el ritmo aumenta, la disminución es mucho mayor, pero esa intensidad se puede dar en ambas disciplinas, pero en el spinning, es más común.
¿Cuál genera mayor motivación?
Todos tenemos claro, que la motivación es clave para desarrollar alguna disciplina, o mejor dicho para no abandonarla, luego de arrancar, aunque eso es algo que depende de cada persona, porque algunos disfrutan el aire libre, el contacto con la naturaleza y la libertad de movimientos, por lo que salir en bicicleta es una experiencia positiva, mientras que para otros, la adrenalina del gimnasio les da motivación. Todo depende.
Igual no podemos dejar de lado, que el spinning, puede engancharnos más, por ser una actividad colectiva, además que la buena música vuelve divertida la rutina de asistir a las clases. También los diferentes circuitos e intensidades, así como las técnicas de respiración y relajación, han servido para que la disciplina gane un gran auge, porque muchas veces es complicado tener un grupo para salir con la bicicleta en exteriores o por cuestiones de tiempo, solo se puede hacer los fines de semana, por lo que el spinning podría animarnos más.
Tiempo en la bicicleta
Obviamente si salimos a andar en bicicleta, nosotros mismos manejamos nuestro tiempo y desarrollamos el recorrido que queremos, ya sea solos o en grupo, mientras que el spinning tiene una duración definida entre una y dos horas, sin interrupción, en la que el cuerpo es sometido a una fuerte resistencia.
Un punto a destacar es que para muchos principiantes, una hora de pedalear de forma intensa durante la sesión, puede generar mucho cansancio, pero no vamos a querer detenernos en la mitad, por pena con el resto, además que la clase en oportunidades es muy fuerte, por lo que manejar bicicleta en carretera, podría ser una actividad más manejable, porque tiene períodos de descanso en bajadas o decididos por nosotros mismos. Obviamente esta es una de las grandes diferencias.
Tonificar las piernas
Si queremos tonificar las piernas, podemos conseguir mejores resultados con el spinning, más allá que las dos opciones son válidas. La diferencia es que los periodos de intensidad en el spinning son más frecuentes, además que las posiciones que se desarrollan en la bicicleta, permiten trabajar los músculos.
En la bicicleta tradicional, a menos que sea un sprint o subamos una colina, las piernas hacen un trabajo más de resistencia, que de fuerza, así que si andamos buscando masa muscular, la podemos conseguir con el spinning.
Si quieres tonificar tus piernas a un máximo nivel debes incorporar rutinas de entrenamiento con peso que incluyan ejercicios como las sentadillas, también conocidas como squats.
Nivel aeróbico
En este caso, la mejor opción es el ciclismo, si queremos un ejercicio aeróbico puro, ya que la media de pulsaciones en una salida tranquila en bicicleta, se encuentra en la zona óptima, mientras que en spinning puede saltar con frecuencia a la zona anaeróbica.
Músculos que se trabajan
En el spinning no solo se ejercitan las piernas, porque al ser una bicicleta estacionaria, también trabajamos brazos, abdominales y músculos del cuello, mientras que en el ciclismo tradicional, podemos desarrollar brazos en una mountain bike, en un terreno inclinado, o con rocas, que nos obligue a esforzarnos, pero al final, todo el esfuerzo está en las piernas, y esta es otra de las grandes razones, por lo que ha ganado tanto auge en los últimos años el spinning, ya que puedes desarrollar tu cuerpo.
¿En cuál de las dos hay más riesgo?
Al hablar de riesgos, obviamente salir a andar en bicicleta en la ciudad, se llevaría el premio, por el peligro de pinchazos o de caídas, que pueden generar fuertes lesiones, mientras que en el spinning, podríamos sufrir calambres, pero nadie nos va a atropellar, accidentes que lamentablemente suceden a menudos por conductores que no respectan a los ciclistas.
Además, en algunos países también existen zonas inseguras para manejar bicicleta, especialmente para salir solos, por lo que muchos prefieren, por cuestión de tiempo y comodidad, acudir a un gimnasio, en el que pueden desarrollar la actividad bajo techo.
Igualmente ambos son deportes de bajo impacto, con poco riesgo a las articulaciones, pero no podemos descuidarnos, porque podríamos castigar la rodilla con un exceso en el spinning o en la bicicleta, al no colocar correctamente el pie en el pedal. Siempre debemos tener precauciones.
Beneficios de ambas disciplinas
- Reducen la grasa corporal
- Mejoran el estado cardiovascular.
- Tonifican nuestros músculos
- Nos permiten calmar el estrés y relajan el sistema nervioso.
- Le dan fuerza a los huesos
- Reducen la flacidez y la celulitis.
- Estimulan el metabolismo
- Oxigenan los tejidos y los distintos órganos del cuerpo.
Con toda esta información, nos queda claro, las grandes diferencias que existen entre el ciclismo y el spinning, porque no es solo que uno se realice bajo techo y el otro al aire libre, aunque al final, la decisión de intentarlo con estas disciplinas depende de cada uno de nosotros y de lo que estemos buscando.
Obviamente si somos principiantes, pedalear al aire libre puede ser la mejor opción, porque incluso es algo relajante, al estar en contacto con la naturaleza, pero claro, si buscamos resultados en nuestro cuerpo, o específicamente queremos ver cambios en nuestras piernas, tenemos que decidirnos por el spinning.
Lo importante es que nos sintamos cómodos con lo que estamos realizando, además que aprendamos a dosificar el esfuerzo que desarrollamos en la actividad para evitar las lesiones. Al final, no son disciplinas excluyentes y ambas nos generan beneficios importantes para nuestro cuerpo de fuerza y resistencia, por lo que podemos intentarlo con las dos.
Disfrutamos de la música y la intensidad con el spinning en el gimnasio, mientras que otro día compartimos con amigos y la naturaleza en nuestra bicicleta de montaña. Al final, lo importante es darle a nuestro cuerpo el ejercicio que necesita.
¡Vamos a pedalear!